Antes de iniciar un juicio de familia la ley exige que haya una mediación por tres motivos principales y es llegar a acuerdo en cuanto a pensión de alimentos, ya sea que se soliciten por primera vez o se requiera un aumento, rebaja o cese de estos; la tuición de los hijos y su cuidado personal; y por último el régimen de visitas que deben tener los padres para con los hijos.
Si nunca se ha realizado una mediación familiar el tribunal no dará curso a la demanda presentada.